SOBRE ANTONIO CARRILLO ROBLES. Juan Cejudo

Cuando habeis hablado algunos sobre Antonio Carrillo Robles, reconozco que he sentido como una emoción especial.

A mí también este Caballero de Compañía-1 me trae recuerdos y emociones inolvidables que quiero compartir con vosotros.

Cuando Carrillo llegó a nuestro Seminario procedente de Murcia, el ambiente que se respiraba en nuestro "Semi" era de lo más cerrado del mundo. Recuerdo que toda la prensa estaba prohibida y que sólo se podía leer "Eclessia" y "Mundo Negro". No había ninguna influencia del exterior. Allí sólo se dedicaba uno a la oración y al estudio. Todo lo que no fuera esto, para D. Pablo Álvarez Moya, Rector entonces, era considerado una tentación y un peligro.

Antonio Carrillo tuvo el arte de conquistarse al Rector para que nos dejara oir música clásica y tuvimos muchas audiciones en el salón de estudio de diversas obras musicales. Aún recuerdo "La Moldavia" cómo nos la explicaba y retrataba mientras sonaba la música. Carrillo tuvo el arte de contagiarnos a algunos de nosotros la música. De él aprendí a afinar en solfeo con perfección. Él me contagió la ilusión por aprender los instrumentos musicales : bandurria, laud, guitarra, banyo...Él nos ensayaba en la Schola como nadie lo hizo nunca. Con una paciencia infinita.

Cuando no salía bien, sonreía y nos decía "vamos, otra vez". Tenía ese arte para hacernos los ensayos algo divertido y alegre( mientras las clases de gregoriano con D. Máximo se hacían tediosas).

Carrillo me animó a aprender especialmente la guitarra, pues yo había empezado con la bandurria de ver tocar a mi primo Juan Benítez en mi casa.

Carrillo entonces estaba aprendiendo guitarra con el método oficial del Conservatorio y lo hacía con una perfección increible. Con frecuencia se venía a mi cuarto o me llamaba para ir al suyo y, (después del silencio mayor) me tocaba las lecciones que él estaba aprendiendo y yo me quedaba embobado durante muchísimo tiempo viendo cómo sonaba aquel instrumento de las seis cuerdas.

Esta pasión por la música me ha durado toda mi vida y se la debo a él. Cuando él terminó sus estudios, cogí el relevo en la dirección de la schola, rondalla y gregoriano y disfrutamos muchísimo, especialmente con la rondalla.

Esta pasión por la música y la guitarra la sigo teniendo hasta el día de hoy. Pude cursar estudios en el Conservatorio de Cádiz donde saqué mi diploma en Guitarra e hice los 5 años de educación musical (solfeo), canto coral y algo de armonía.

También hice un curso en Magisterio en la especialidad de educación musical y algunas asignaturas de 2º y 3º.Pero me fue imposible de terminar porque tenía que trabajar.

Todo esto ha sido sin duda, por influencia de ese Antonio Carrillo Robles al que no he vuelto a ver desde que se fue y al que me gustaría poder decirle todo esto para satisfacción suya.

Si alguien tiene su correo electrónico, le agradecería me lo dejara para poder contactar con él.Necesito decirle cómo me enriqueció su amistad y me contagió la afición musical. Él lo vivía tanto, que lo "pegaba" por contagio.

Un saludo cordial para todos : Juan Cejudo