LLENO HASTA LA BANDERA PARA ESCUCHAR A PAGOLA HABLAR DE JESÚS DE NAZARET. Juan Cejudo, miembro de MOCEOP y de Comunidades Cristianas Populares

He estado escuchando las dos conferencias que el teólogo José Antonio Pagola dió ayer y anteayer en la Parroquia de Santo Tomás de Cádiz.

Ya las conocía porque en el encuentro de CCP provincial las habíamos comentado y él las había expuesto también en la Universidad de Cantabria.

Pero me hacía ilusión poderlas oir en vivo y en directo en boca de su autor al que personalmente no conocía.

Lo primero que sorprende en esta época de iglesias vacías es que la iglesia estuviera a rebosar, con gente en los pasillos, de pie y hasta fuera en la calle. Más de 400 personas cada día para oir hablar sobre Jesús de Nazaret no es frecuente verlo en nuestras iglesias.

Y es que por algo del libro "Jesús. Aproximación histórica" se han vendido ya más de 80000 ejemplares, a pesar de haberse tenido que retirar de todas las librerías religiosas de España por orden de los obispos.

La primera de ellas se titula "La alternativa de Jesús".

Jesús sale por caminos y pueblos, después de su estancia en el Jordán con Juan el Bautista, para comunicar a todo el mundo que el Reino de Dios ya está aquí.

Un Reino que tiene como principio la compasión con el prójimo porque Dios es compasivo.

Donde los últimos son los que tienen toda la prioridad y hay que devolverles toda su dignidad.

Jesús se preocupa sobre todo de aliviar el sufrimiento humano y la marginación.

Y ofrece el perdón como horizonte

La segunda conferencia se titulaba: "Volver a Jesús, el Cristo: tarea urgente en la iglesia de hoy".

Pagola fue desmenuzando los puntos de su conferencia con todo detalle, pero para yo no alargar demasiado sí deciros que insistía una y otra vez que lo fundamental de la tarea de la iglesia tenía que ser poner la verdad de Jesús en el centro de nuestras preocupaciones. Teníamos todos los cristianos (no sólo la jerarquía) que vivir como Jesús, pensar como Jesús, actuar como actuaría Él hoy.

Para eso consideraba fundamental leer con frecuencia, a solas o en los grupos y comunidades los evangelios para alimentarnos con las cosas que Jesús decía, pensaba y hacía. Y así intentar imitarle.

Debemos convertirnos a Jesús. Retomar nuestro carnet de identidad cristiano: "seguidores de Jesús".

Para ello es fundamental acoger al otro, escucharle, acompañarle.

Como comprenderéis no puedo exponer aquí con todo detalle las dos horas que duraron las conferencias.

Sí deciros que todos le escuchábamos con verdadera atención y silencio. Al final de cada charla se dedicó un tiempo a contestar varias preguntas de los presentes.

Al terminar su conferencia el primer día, muchos nos acercamos a que nos firmara sus libros que muchos llevábamos.

Debo decir que sentí una especial emoción cuando le acerqué el libro para que lo dedicara a nuestra Comunidad de base ( el libro lo compramos todos con el fondo de la comunidad) y al decirle mi nombre, se puso de pie ( había estado todo el tiempo sentado firmando los libros) para preguntarme si yo era Juan Cejudo porque le sonaba mi nombre y le habían hablado de mí.

Yo le dí un gran abrazo lleno de emoción y estuvimos varios minutos hablando de varias cosas, aunque yo estaba sufriendo porque la gente que venía detrás estaba esperando.

Y es que en ese abrazo quería transmitirle todo mi agradecimiento por tanto bien como me ha hecho, y nos ha hecho a tantos, con sus libros, sus artículos y sus comentarios al evangelio de cada domingo.

Y también en solidaridad con él que tanto ha sufrido con los inquisidores episcopales de dentro y de fuera de España que le han prohibido seguir vendiendo un libro que incluso obtuvo el Nihil Obstat del anterior obispo de S. Sebastián. Y el nuevo que tiene preparado para publicar tampoco le dejan que se edite.

Le dí las gracias y me marché emocionado. Tuve la suerte de que un compañero de la Hoac me hiciera unas fotos de recuerdo mientras me firmaba el libro.

Y un aviso a navegantes: se pueden llenar iglesias cuando se presenta bien a un Jesús que verdaderamente atrae al hombre de hoy.

Las dos conferencias fueron rubricadas con aplausos prolongados de todos los presentes.

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Fotos: Juan Cejudo