Ya he expuesto en otros artículos la importancia que tiene para los gaditanos la figura de Fermín Salvochea. No voy a repetirlo ahora. Sólo con leer la inscripción del frontal del busto que está en la foto podréis comprenderlo.
Ahora quiero subrayar aquí que nuestro Ayuntamiento tiene abandonado la conservación del busto de este gaditano insigne, alcalde de Cádiz, figura de proyección internacional.
En la foto de arriba, el busto hace unos días. Como se puede comprobar, las letras están prácticamente ilegibles. Ha desaparecido el resalte color oro que siempre tuvo el texto de la inscripción y también ha desaparecido el reborde inferior.
No me extraña, porque dentro de esa zona de jardines se juega a la pelota durante las tardes sin que nadie diga nada. Da igual que se deterioren los jardines y las plantas y el busto pierda sus letras y sus piezas de granito.
Pienso que con un poco de interés se debería cuidar mejor esta zona de nuestra Plaza por la que tanto se luchó desde la A de Vecinos del barrio.
¡Cómo recuerdo al presidente Victoriano Osuna, con el que estuve compartiendo responsabilidades, ya fallecido! Era constante en llamar la atención a los niños de la Barriada para que cuidaran de los árboles recién plantados y respetaran las flores.
Es responsabilidad de nuestro ayuntamiento el cuidado de los monumentos y bustos de nuestra ciudad. Pero, de modo muy especial, este busto de Salvochea merece una mayor atención y cuidado.
Nos costó muchos meses poder ponerlo ahí y sufragarlo, por suscripción popular, pero también con el apoyo de los ayuntamientos de Cádiz y Puerto Real que presidían Carlos Díaz y José Barroso.
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