Desde hace unos meses un pequeño grupo de personas creyentes pertenecientes a distintos colectivos cristianos nos venimos reuniendo, más o menos con carácter mensual, para ir reflexionando y, en la medida de nuestras posibilidades, también actuando, de cara al problema de la crisis que nos afecta a todos y que está dejando en la cuneta de la vida a miles y miles de personas.
Desde la primera reunión nos fijamos en uno de los colectivos que en Cádiz, como en otros sitios de España, están sufriendo en mayor grado esta marginación social y humana: los sin techo. Según nuestros cálculos, hasta 300 personas hay durmiendo en Cádiz en plazas, portales, cajeros automáticos, naves y casas abandonadas por toda la ciudad.
Ayer nos vimos 11 personas. Empezamos con una oración que animó un compañero. Leímos una "Proclama profética contra los dirigentes" y a continuación la lectura de la parábola del Buen Samaritano y el comentario del teólogo José Mª Castillo.
Después otro compañero expuso con todo detalle el problema de la pobreza y la marginación en la Biblia: Antiguo Testamento (Libro de JOB, Éxodo, Profetas, Libros Sapienciales, Isaías...). Nuevo testamento: el testimonio de Jesús, nacido pobre, amigo de pobres, vivió pobremente...Su predicación en las bienaventuranzas donde muestra su preferencia por los que sufren , los que lloran, los que pasan hambre...
Luego habló de las cartas de Santiago, de Pablo...Los Santos Padres que siempre alientan a vivir y luchar por la justicia para eliminar esa situación de pobreza y marginación que Dios no quiere para nadie.
Terminó el compañero insistiendo en la necesidad que hay de formar a cristianos en los temas socio-políticos para poder ser más efectivos en la lucha contra la injusticia y para expresar de modo más efectivo nuestra solidaridad y compromiso con quienes más sufren
Después hubo una muy activa participación de muchos de los presentes. Yo intervine para expresar mi apoyo a todo lo expuesto. Dije que estando tan claro en los Evangelios el camino a seguir, había después una gran contradicción con la práctica concreta de la jerarquía de la Iglesia que es lo que provoca el gran rechazo social que existe contra el vértice de la jerarquía: Vaticano, cardenales, obispos...De hecho, en la última encuesta del CSIC, los obispos, de una lista de 37 entidades de España, están en los últimos lugares de valoración.
Debo decir que existe un buen clima de entendimiento entre nosotros y todos nos sentimos a gusto para poder expresarnos con libertad diciendo lo que pensamos. Pero, además, pienso que hay una sintonía buena entre los presentes que facilita el poder seguir viéndonos y participando con interés.
Quedamos en vernos dentro de un mes aproximadamente.
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