Unas 40 personas estuvimos hoy acompañando al compañero Karlos en los juzgados. Estuve hablando con él y me estuvo contando la rocambolesca historia de su denuncia. No tiene ni pies ni cabeza. Se ve claramente que van a por él. Que al poder le duele que él denuncie con sus vídeos todo lo que considera que es una injusticia o un abuso de autoridad.
Cierto que el compañero tiene su propia forma de decir las cosas. Suelta tacos y palabras "malsonantes", pero nada comparable a expresiones y relatos de personajes famosos como los del premio Nobel Camilo José Cela. Basta con leer de él La insólita y gloriosa hazaña del cipote de Archidona. A ellos se les tolera todo. Son famosos.
Pero aquí lo que molesta es lo que el compañero denuncia: al poder municipal, sea a la propia alcaldesa, por su prepotencia y ninguneo a los ciudadanos y oposición en los plenos o a sus agentes municipales, la denuncia al mamotreto o monumento del bicentenario, al urbanismo de la ciudad y tantas cosas como este ciudadano viene denunciando en sus vídeos caseros. El poder no tolera eso. Por eso lo denuncia. Personas así son molestas para el poder y quieren silenciarlo. Difícil lo tienen. Porque Karlos no está sólo. Sólo en facebook tiene más de 2.000 seguidores.
Y aplazan una y otra vez lo que iba a ser un juicio de faltas en el mes de septiembre. Hoy, de nuevo es aplazado hasta el 5 de marzo, pero además se le comunica que la cosa va a ir a mayores y podrá ser juzgado por lo penal. ¡Qué disparate! Todo un sin sentido y todo muy rocambolesco. Está claro que quieren ir a por él y tratan de acallarlo.
Por eso, hoy muchos hemos estado hoy con él. No nos fijamos tanto en sus expresiones de forma a la hora de hablar, como en el fondo de lo que denuncia, que tiene toda la razón. Este ayuntamiento tiene que acostumbrarse a recibir críticas de los ciudadanos y de los colectivos sociales. Se supone que estamos en un país democrático. Pienso que no debería fijarse tanto en las formas como en el fondo. Y reconocer sus errores. Saber dialogar con la gente , más que reprimir.
Porque en la calle hay mucha indignación y mucho malestar. Más que denuncias, lo que deben hacer es acercarse a los ciudadanos, escucharlos y buscar soluciones a los problemas que se les demandan.
Cuando Karlos salió hoy de los juzgado estuvo informándonos del contenido de la comunicación recibida. Él seguirá con sus vídeos. No lo van a callar tan fácil. El próximo será sobre las marchas de la dignidad del 22 de marzo.
Varias columnas de ciudadanos que desde todos los rincones del país se concentrarán en Madrid para exigir a nivel nacional lo mismo que aquí estamos pidiendo: el fin de todos los recortes y todas las represiones ciudadanas y un nuevo sistema que escuche a los ciudadanos. El cartel lo decía muy claro: el 22 de Marzo: todos a Madrid
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