jueves, 4 de mayo de 2017

ASISTÍ EL PASADO DÍA 1 A LA MANIFESTACIÓN DEL 1º DE MAYO. Juan Cejudo


Con un cierto sabor agridulce asistí el pasado día 1  a la manifestación del 1º de Mayo. Digo sabor agridulce porque había que optar por una de las tres convocatorias: la de CCOO-UGT, la de CNT o la de los sindicatos alternativos : SAT, A.O, CGT, USTEA...

Mirándolo friamente cuesta asimilar que los trabajadores tengan que estar tan divididos frente al poderoso capital que nos machaca a todos. Pensaba en el primer 1 de Mayo que se celebró en Cádiz en 1.890 convocado por Salvochea que aglutinó a todos los obreros, sin ningún tipo de división ni convocatorias por separado.



El secretario del Círculo obrero declaró entonces: "La miseria ha conseguido la unión completa de todos los trabajadores sin distinción de localidades". 

Aunque sí que existieron tensiones desde ese mismo año entre sectores socialistas y anarquistas. Los  socialistas querían manifestaciones pacíficas y moderadas y los anarquistas querían una huelga general para implantar la jornada laboral de 8 horas. 

Pero, a pesar de las tensiones, acudieron todos juntos a la convocatoria de Salvochea, quien al año siguiente sería encarcelado por publicar en un suplemento de "El Socialismo", que él dirigía, un artículo  en el que se incitaba a los trabajadores a construir  "una nueva sociedad sobre las ruinas del viejo sistema". 

Es decir, aquellas convocatorias del 1 de Mayo tenían un carácter revolucionario, no moderado. Se buscaba construir una nueva sociedad porque lo que había no servía a los trabajadores. (¿Lo de hoy sí?)

Escogí ir en la manifestación de A.O-CGT, SAT, 22M porque me parecía mucho más reivindicativa. De hecho, los gritos eran contínuos desde que salimos de la estación de Renfe de 2ª Aguada hasta llegar al Cerro del Moro.



Me gustó más también el itinerario, atravesando todos los barrios obreros del Cádiz de extramuros.


Allí estaban numerosos colectivos que luchan a diario en las calles como el Movimiento en lucha contra el desempleo y la exclusión social o la Marea de pensionistas, por poner solo dos ejemplos. También casi todos los compañeros de nuestra Asamblea Popular Luís Pérez del 15M, repartidos en diversos sitios.



Me llamó la atención el gran número de manifestantes (muchos más que el año pasado).

Estuve durante el recorrido con unos amigos de toda la vida con los que hacía algún tiempo no nos veíamos y tuve también la gran alegría de poder saludar a unos amigos de hace también muchos años que han estado fuera mucho tiempo y que ahora están por aquí. ¡Cuántos recuerdos!

Pensando en la necesaria unidad (que todos pregonan)¿no se podría organizar una sola manifestación aunque fuera con tres bloques diferenciados, pero todos unidos? Recuerdo perfectamente en las primeras manifestaciones de la democracia cómo el bloque anarquista entonces marchaba muy separado de los organizadores, con sus camisas negras y sus banderas, como queriendo dejar claro que ellos eran diferentes. Muy bien, pero iban en el mismo recorrido.



Ahora no, ahora cada bloque va por un lado distinto dando una pésima imagen de desunión, que seguramente refleja la realidad de lo que hay. No digo que no. Pero no deja de ser triste, en mi opinión, que tenga que ser así.

Porque la derecha siempre va unida por intereses, pero unida.




Al llegar al Cerro del Moro eché en falta un buen equipo de sonido porque donde yo estaba, casi al final, no se escuchaba nada.






De todos modos, muy positiva y alentadora ver tanta participación  en un día tan señalado para los trabajadores como es el 1 de Mayo.

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