Antonio Casado, para quienes no se acuerden, es un sacerdote que estuvo de párroco en Vejer de la Frontera, muy bien valorado por sus vecinos, como así vino publicado en la prensa y que fue suspendido cautelarmente de sus funciones por el obispo, hace ahora dos años, por unas supuestas apropiaciones indebidas. El obispo hace un año lo denunció canónicamente ante un tribunal eclesiástico en Sevilla. En el juicio, el abogado de Antonio Casado, pudo demostrar no ser ciertas dichas acusaciones y se está pendiente de sentencia.
Quien quiera recordar bien, con más detalles, la historia de Antonio Casado, le recomiendo lea lo que escribí en este blog en diciembre del año pasado, pulsando en el siguiente enlace:
Han pasado dos años y este sacerdote, que viene reclamando insistentemente tener una entrevista con su obispo, recibe la callada por respuesta. Mientras, sigue inactivo estos dos años.
Me ha enviado una carta con el ruego de su difusión pues ve que va pasando el tiempo sin poder solucionar su anómala situación.
Desde aquí, una vez más, todo mi apoyo y comprensión con este buen sacerdote.
Un cordial saludo: Juan
CARTA-REFLEXIÓN DE ANTONIO CASADO
Resuenan ya golpes de martillo, conversaciones lejanas, tráfico, vida…
Estamos en la fase dos del confinamiento, pero hay cosas que siguen igual. Yo sigo confinado y cada día menos confiado. Muchos y muchas como yo, aunque nos animen y nos digan que todo va a cambiar después de esta pandemia, seguimos sin trabajo, que no es producción ni economía solamente, sino dignidad. Muchos y muchas seguimos sufriendo la indiferencia, la mentira, en definitiva el mal que nos hacen y que no es solamente estructural o formal, sino la mayor parte de las veces personal e intencionado.
En mi caso ya van 2 años de indiferencia, de alejamiento obligado, de desprecios y calumnias, de dimes y diretes pero pocos intentan saber la verdad de lo ocurrido. A veces pienso que algunos intentan hacerme el mal simple y llanamente.
Dicen algunos que de esta vamos a salir mejores personas, no lo se. Lo que si se es que hay cosas que siguen igual. Cosas que se pueden resumir en cosas malas y buenas, a veces mejores y a veces peores. Siempre ha habido sujeto y objeto, ricos y pobres, patrón y marinero, obispos y curitas.
Oigo y leo las noticias, también del Obispado de Cádiz Y Ceuta. Más de lo mismo… que si yo digo la verdad que si tu mientes, que si yo tengo razón y tu no, que si lo mío es moral y lo que tu haces es inmoral… como si todo fuera tan evidente, blanco o negro, par o impar.
He aprendido también en este tiempo que existe el mal y la mentira, que es el peor de los males. Antes lo sabía de oídas y por los libros, ahora lo he experimentado en carne propia. En los libros de moral aprendí que hay pecado y que Dios siempre que nos arrepintamos está dispuesto, como Padre bueno que es, a perdonarnos y en los libros de filosofía moral aprendí que siempre, hagamos lo que hagamos, somos libres y aunque nos equivoquemos lo seguimos siendo…”si fallor sum”
La verdad es que el mal existe, que es ausencia de bien y que también tiene algo de real, que no se rinde por sí mismo, que se expande y propaga implacable y cruel como este virus.
A los curas se nos ha inculcado siempre que debemos hacer el bien, cueste lo que cueste y decir la verdad …también nos enseñaron la prudencia, que no es miedo ni cómoda despreocupación.
Pero pocas veces no enseñaron en el seminario a ejercitarnos contra el mal y la mentira para que no nos pille desprevenidos. Quizás por eso nos ha pillado a traición, desprevenidos ante este virus biológico y sociopsicológico.
Y es que yo creo que estamos hechos para el bien, hechos de bondad y amasados para amar.
Mi total apoyo.Mi marido Diego y yo Victoria estamos pasando por momentos muy duros espero que le sirva para algo aunque sea para apoyarnos unos con otros.Nos sentimos orgullosos de pertenecer a la otra parte la parte de la honestidad la humildad y el buen hacer como lo haria nuestro SEÑOR JESUCRISTO.Que el PADREbueno del cielo y de la tierra nos proteja de los demonios.un abrazo fuerte .Animo a volver a encontranos todos los que hemos y estamos sufriendo tanto.
ResponderEliminarVerdad Victoria. Vosotros también habéis sufrido en vuestras carnes las consecuencias del despido injusto de Diego, después de llevar muchos años trabajando en Cáritas.
ResponderEliminarMucho ánimo y fuerza para poder salir adelante. Estamos con vosotros.
Muchas gracias Juan a ti y a todos.DIOS Sabe mucho nos a puesto muchos angeles a nuestro alrededor para apoyarnos.
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ResponderEliminarGracias Viki y Diego. Hay otra manera de entender la Iglesia
EliminarQue no falte la misa... Así todos tranquilos.... Es lamentable.
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