El Viernes Santo celebramos de modo especial la Pasión y Muerte de Jesús, aunque con la mirada puesta en la Resurrección.
Una muerte que estaba cantada desde que Jesús empezó a anunciar la Buena Nueva. Fueron continuos sus enfrentamientos con los poderes religiosos: escribas, fariseos, sumos sacerdotes..., porque quebrantaba la ley de los judíos en numerosas ocasiones: "El sábado debe estar para el hombre y no el hombre para el sábado". Atacaba la hipocresía de aquellas personas, oficialmente "religiosas", llamándolas sepulcros blanqueados, raza de víboras, ciegos, guías de ciegos....Estaban
deseando matarle....
El colmo fue cuando antes de entrar en Jerusalén en el Templo, volcó las mesas de los cambistas, derribando los puestos, porque " la casa de mi Padre es casa de oración y vosotros la habéis convertido en cueva de bandidos"...
Jesús no murió "en redención por nuestros pecados" como muchos aún siguen predicando. A Jesús lo asesinaron, lo mataron los poderes religiosos sobre todo y también políticos de su tiempo. Era una persona peligrosa para el sistema, un revolucionario, que atraía a las masas, un subversivo. Se atrevió a atacar el poder religioso y financiero que significaba el Templo de Jerusalén y éso no se lo perdonaron. Debía morir. Fue la guardia del Templo la que fue a buscarlo al Huerto de los Olivos para prenderle, guiada por Judas que se vendió por unas monedas de plata.
Y es que Jesús anunciaba el Reino de Dios, donde los pobres eran los preferidos (ahí están las Bienaventuranzas,: felices los pobres...los sedientos de justicia, los que construyen la paz, los que tienen compasión de los demás, los que lloran...los que son perseguidos por luchar por la justicia....)
A Jesús, después de hacerle sufrir mucho, lo crucifican como crucificaban a los revolucionarios, a los políticos, a los rebeldes...porque se había hecho llamar Rey. Siente el abandono de todos y hasta el abandono de su Padre.
Es un día para la contemplación. El hijo de Dios crucificado junto a otros dos revolucionarios (no ladrones), como dice Castillo, pues se utiliza el término "lestaí" con el que se designa a los rebeldes políticos y a los subversivos contra el sistema. Ese Jesús que salva, lo hace desde la identificación con los que no son nada, con los mal visto por el poder religioso y el poder político...Todo lo contrario a los criterios del Mundo, que sólo valora al que tiene mas poder, mas dinero, mas prestigio, mas capacidad de armamento, mas influencia social, al que es famoso....
Pues ése es el misterio de la salvación. Dios salva desde la nada. Pero lo resucitará para demostrar que ese Jesús, con ese estilo de vida, con esos criterios, con su mensaje de liberación y de estar con los más desfavorecidos, ese Jesús es el que nos da vida y esperanza para construir un Mundo más justo, más fraterno , más igualitario, porque todos somos hijos de Dios y debemos vivir como hermanos, no que unos pocos lo acaparen todo y una gran mayoría apenas pueda vivir...
Por eso este Viernes Santo no podemos quedarnos sólo mirando el sufrimiento, la Pasión, la Muerte de Jesús. Debemos tener los ojos puestos en la Resurrección, porque es lo que da sentido a todo este sufrimiento y muerte de Jesús tan inhumana, tan sin sentido.
Jesús sigue muriendo hoy en nuestro mundo de muchas maneras: en los millones que han perdido la vida y la siguen perdiendo por el Covid, en las decenas de miles de muertos por esta maldita guerra en Ucrania y por tantas malditas guerras en Yemen, en Siria, en Palestina, en Etiopía y en muchos otros países de Latinoamérica, África o Asia...
Jesús muere por abandono en muchos ancianos y ancianas abandonados y en soledad, muere en miles y miles de inmigrantes y refugiados que pierden la vida en el Mediterráneo o en Atlántico o en la frontera de México y EEU por intentar sobrevivir a las guerras, al hambre, a la miseria....sigue muriendo en tantas y tantas personas que viven en la calle, en las duras noches de invierno, por no tener una vivienda....en muchas personas que poco a poco van muriendo por falta de atenciones sociales varias, para poder sobrevivir....
También hoy, en muchas partes del Mundo, muchas personas, como Jesús, dan su vida, entregando lo mejor de ellos mismos por ayudar a los demás, por denunciar las injusticias, por enfrentarse a los poderosos, a los corruptos...Su muerte es semilla de Resurrección.
Berta Cáceres |
Óscar Romero |
Nuestro compromiso como cristianos debe ser mirar a Jesús, su mensaje, sus gestos, sus acciones, para tratar de imitarle buscando la felicidad sobre todo de los que menos tienen, de los más desfavorecidos. Hoy eso significa también un compromiso social, cultural, político, con honestidad y sin egoísmo, colaborando con diversos colectivos para luchar por un Mundo más justo e igualitario, contra la exclusión social, contra la corrupción, por los derechos humanos....
En la línea que el buen Papa Francisco viene siempre insistiendo, especialmente en su encíclica Fratelli Tutti
"Chapo",Juan, por tu reflexión . Servirá a mucha gente. Gracias!
ResponderEliminarMuchas gracias...
ResponderEliminarGracias Juan por tu reflexión, es muy necesaria para los creyentes en los tiempos que corre, en la iglesia y en la sociedad.
ResponderEliminarMuchas gracias, José Manuel. Un abrazo
ResponderEliminarEvidentemente no se puede pensar en la muerte de Jesús por la redención de nuestros pecados. Eso sería pensar en un Dios justiciero y necesitado de venganza. Pero Jesús es algo más que un revolucionario, que también. Pero la respuesta de lo que Jesús es está en nuestro interior y a través de la oración y el silencio que nos permita entrar en ese interior vamos descubriendo la verdad de Jesús, y tomamos conciencia de quién es Él para cada uno. Gracias por tu reflexión que nos da conciencia de quién son hoy los crucificados.
ResponderEliminarMuchas gracias Joaquín. FELIZ PASCUA DE RESURRECCIÓN!
ResponderEliminarGracias Juan, Por tu compromiso y tu aliento!
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