En el evangelio de Mateo queda clara una cosa: las primeras testigos de la Resurrección son las mujeres: María Magdalena, que tanto amaba a Jesús y la otra María, que sería María la de Santiago. Según Lucas también Juana "y las demás mujeres que estaban con ellas".
Hay distintas versiones sobre la Resurreción en los 4 evangelistas pero en todos la misma coincidencia: María Magdalena y las mujeres fueron las primeras testigos de la Resurrección de Jesús.
Las mujeres tuvieron un gran protagonismo en los comienzos del cristianismo. De ahí que era normal que ellas también presidieran la eucaristías cuando se celebraban en sus casas y que más tarde fueran presbíteras y epíscopas como lo demuestran inscripciones arqueológicas encontradas. "Theodora epískopa".
Esto me lleva a hacerme algunas preguntas ¿Cómo puede la Iglesia ser tan machista? ¿Cómo pueden haber acaparado los hombres casi todos los cargos de responsabilidad en la Iglesia? Provoca un gran rechazo ver esas reuniones de obispos, cardenales, los concilios...donde todos son varones y además con vestimentas extrañas , con mitras y báculos, propias de otras épocas...
Cierto que Francisco tímidamente se está atreviendo-frente al rechazo de importantes sectores tradicionales de la Iglesia- a ir nombrando algunas mujeres para determinados cargos eclesiales. Pero es absolutamente insuficiente. Las mujeres deben tener mucho más protagonismo en la Iglesia y poder tener las mismas responsabilidades que los hombres. Hay muchas mujeres muy preparadas para ello. Este machismo eclesial provoca un gran rechazo en el Mundo de hoy donde las mujeres tienen importantes responsabilidades en muchísimos campos.
En este sentido el Movimiento de la Revuelta de las Mujeres en la Iglesia, presente ya en 21 países, me parece fundamental y también el Movimiento de presbíteras católicas que en número superior a 150 ya ejercen como tales, aunque la Iglesia aún no las reconoce.
La otra reflexión importante que me hago este día es cómo Dios resucita a Jesús. Jesús no termina como un fracasado, sino que Dios está con Él, con su causa, que es la causa del Reino de Dios y lo resucita.
El poder del Imperio político y religioso lo había asesinado porque les molestaba, era una persona peligrosa para ellos: un subversivo, un revolucionario que soliviantaba a las masas. Fue asesinado por político: se había manifestado como Rey y eso era un peligro para el poder romano y también para el poder religioso. Toda su vida había sido una provocación para ellos que desde el primer momento que Jesús habló en la sinagoga quisieron tirarlo por un barranco para matarlo. Pero Dios está con Él.
Aquellos discípulos que habían huído por miedo y que estaban temerosos, ahora se hacen fuertes, vuelven a unirse y toman una gran fuerza. Ellos también son testigos de la Resurrección de Jesús. Jesús se les aparece en diferentes ocasiones, se les hace cercano, como en el pasaje precioso de los discípulos de Emaús que se transforman y sus corazones arden con la cercanía de Jesús...
Si Jesús resucitó, también nosotros resucitaremos con Él. Esta es nuestra fe. No es una evidencia demostrable científicamente que Jesús resucitó. Nadie lo vio físicamente, pero lo creemos firmemente por nuestra fe.
Debemos esforzarnos en luchar por las mismas causas que Jesús luchó: construir un Mundo de paz, un Mundo donde todos podamos sentirnos iguales, como hermanos, donde se elimine toda discriminación, donde se alivie el sufrimiento de la gente, donde nuestros preferidos sean los pobres, las personas sencillas, los más vulnerables. Que fomentemos la paz, la justicia, la fraternidad, el apoyo mutuo, la solidaridad con quienes menos tienen.
Que el programa de las Bienaventuranzas sea nuestro programa, que construyamos un Mundo donde el centro sea la persona, no el dinero, donde acojamos a cuantos se sienten marginados por esta sociedad excluyente por un sistema económico que mata ..
Que nos preocupe el respeto a la Madre Naturaleza y que apoyemos y nos unamos con cuantos de un modo o de otro luchan, sean creyentes o no, por ese Mundo distinto donde se deben respetar los derechos humanos, hoy tan pisoteados en tantas partes del Mundo, donde existen las guerras (Ucrania, Palestina Yemen.....), el hambre, la peligrosa emigración que provoca miles de muertos, la violencia, la corrupción, la destrucción de la Naturaleza etc..etc...
¡Qué bien lo explica el papa Francisco en su encíclica "Fratelli tutti"!
Sin duda es más cómodo no hacer nada, no esforzarse en nada. Pero si de verdad el mensaje de la Resurrección nos dice algo, debe ser para seguir los pasos de Jesús. Por eso los creyentes debemos ser grandes utópicos, soñadores, pero para intentar hacer todo esto realidad, unidos con tantas y tantas personas que hoy dan testimonio en todo el Mundo en la defensa de un sistema económico y socio-político más justo e igualitario para todos, sobre todo para quienes menos tienen.
No todo terminó en la cruz. Dios lo resucitó.
Si con Él morimos, viviremos con Él.
Juan, quiero manifestar mi creencia... Dios, Misericordia VIVE en cada ser humano creyente o no creyente... A Jesús lo resucita Dios a través de Maria Magdalena y demás mujeres... Ellas creyeron en el mensaje de Jesús y lo siguieron anunciando (NO SE QUEDARON MIRANDO AL CIELO.
ResponderEliminarIGUAL QUE JESÚS SE HIZO MANOS, OJOS, OÍDOS, BOCA DEL PADRE-MADRE, MARIA MAGDALENA LO HIZO CON JESÚS.
Muchas gracias Carmen por tus comentarios que valoro y te agradezco. Un cordial saludo
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