Iba a escribir una reflexión sobre mis vivencias en este Viernes Santo 2024, pero he releído lo que escribí el año pasado el Viernes Santo y me reafirno en cuanto allí decía. Sigo pensando lo mismo, con algunas nuevas matizaciones de actualidad que incorporo y dejo aquí por si a alguien le viene bien....
Saludos cordiales: Juan
====================
El Viernes Santo celebramos de modo especial la Pasión y Muerte de Jesús, aunque con la mirada puesta en la Resurrección.
Una muerte que estaba cantada desde que Jesús empezó a anunciar la Buena Nueva. Fueron continuos sus enfrentamientos con los poderes religiosos: escribas, fariseos, sumos sacerdotes..., porque quebrantaba la ley de los judíos en numerosas ocasiones: "El sábado debe estar para el hombre y no el hombre para el sábado". Atacaba la hipocresía de aquellas personas, oficialmente "religiosas", llamándolas sepulcros blanqueados, raza de víboras, ciegos, guías de ciegos....Estaban
deseando matarle....
El colmo fue cuando antes de entrar en Jerusalén en el Templo, volcó las mesas de los cambistas, derribando los puestos, porque " la casa de mi Padre es casa de oración y vosotros la habéis convertido en cueva de bandidos"...
Jesús no murió "en redención por nuestros pecados" como muchos aún siguen predicando. A Jesús lo asesinaron, lo mataron los poderes religiosos sobre todo y también políticos de su tiempo. Era una persona peligrosa para el sistema, un revolucionario, que atraía a las masas, un subversivo. Se atrevió a atacar el poder religioso y financiero que significaba el Templo de Jerusalén y éso no se lo perdonaron. Debía morir. Fue la guardia del Templo la que fue a buscarlo al Huerto de los Olivos para prenderle, guiada por Judas que se vendió por unas monedas de plata.
Llama la atención en el Evangelio de Jn, 18, 1-40 y 19,1-42 que se lee hoy, algunas cosas: Son las autoridades religiosas las que insisten una y otra vez en que Jesús debe morir. Es Caifás, el Sumo Sacerdote, el que había dicho "conviene que muera un solo hombre por el Pueblo", el que insiste en que muera Jesús. No se debe soltar a Jesús, sino a Barrabás.
Y pese a que Pilato hasta por tres veces quiere dejar libre a Jesús porque no encuentra motivo, son los sacerdotes, el poder religioso, el que insiste una y otra vez, hasta con amenazas a Pilato de ser enemigo del César, el que insiste para que Jesús, no sólo sea coronado de espinas y fuera escarnecido por los soldados, sino que debe morir en la cruz.
Y es que Jesús anunciaba el Reino de Dios, donde los pobres eran los preferidos (ahí están las Bienaventuranzas,: felices los pobres...los sedientos de justicia, los que construyen la paz, los que tienen compasión de los demás, los que lloran...los que son perseguidos por luchar por la justicia....)
A Jesús, después de hacerle sufrir mucho, lo crucifican como crucificaban a los revolucionarios, a los políticos, a los rebeldes...porque se había hecho llamar Rey. Siente el abandono de todos y hasta el abandono de su Padre.
Pero hay que decirlo también muy claro: sus discípulos había huido. ¿Quiénes estaban allí en el momento de su muerte: su madre, la hermana de su madre y María Magdalena. También el discípulo Juan, según este evangelista. Aunque los demás evangelistas insisten en que quienes estaban allí era sólo las mujeres.
Es un día para la contemplación. El hijo de Dios crucificado junto a otros dos revolucionarios (no ladrones), como dice Castillo, pues se utiliza el término "lestaí" con el que se designa a los rebeldes políticos y a los subversivos contra el sistema. Ese Jesús que salva, lo hace desde la identificación con los que no son nada, con los mal visto por el poder religioso y el poder político...Todo lo contrario a los criterios del Mundo, que sólo valora al que tiene mas poder, mas dinero, mas prestigio, mas capacidad de armamento, mas influencia social, al que es famoso....
Pues ése es el misterio de la salvación. Dios salva desde la nada. Pero lo resucitará para demostrar que ese Jesús, con ese estilo de vida, con esos criterios, con su mensaje de liberación y de estar con los más desfavorecidos, ese Jesús es el que nos da vida y esperanza para construir un Mundo más justo, más fraterno , más igualitario, porque todos somos hijos de Dios y debemos vivir como hermanos, no que unos pocos lo acaparen todo y una gran mayoría apenas pueda vivir...
Por eso este Viernes Santo no podemos quedarnos sólo mirando el sufrimiento, la Pasión, la Muerte de Jesús. Debemos tener los ojos puestos en la Resurrección, porque es lo que da sentido a todo este sufrimiento y muerte de Jesús tan inhumana, tan sin sentido.
Jesús sigue muriendo hoy en nuestro mundo de muchas maneras: sigue muriendo en Gaza, en los más de 32.000 palestinos víctimas de los bombardeos y también del hambre, la mayoría de ellos niños y mujeres, en los miles y miles que siguen perdiendo la vida en la maldita guerra de Ucrania y por tantas otras malditas guerras en Yemen, en Siria, en Etiopía y en muchos otros países de Latinoamérica, África o Asia...
Jesús muere por abandono en muchos ancianos y ancianas abandonados y en soledad, muere en las calles y plazas cada vez que muere una persona sin techo , ni hogar, porque no tienen donde vivir, muere en miles y miles de inmigrantes y refugiados que pierden la vida en el Mediterráneo o en Atlántico o en la frontera de México y EEU por intentar sobrevivir a las guerras, al hambre, a la miseria....en muchas personas que poco a poco van muriendo por falta de atenciones sociales varias, para poder sobrevivir....
También hoy, en muchas partes del Mundo, muchas personas, como Jesús, dan su vida, entregando lo mejor de ellos mismos por ayudar a los demás, por denunciar las injusticias, por enfrentarse a los poderosos, a los corruptos...Su muerte es semilla de Resurrección.
Berta Cáceres |
Óscar Romero |
Nuestro compromiso como cristianos debe ser mirar a Jesús, su mensaje, sus gestos, sus acciones, para tratar de imitarle, buscando la felicidad, sobre todo de los que menos tienen, de los más desfavorecidos. Hoy eso significa también un compromiso social, cultural, político, con honestidad y sin egoísmo, colaborando con diversos colectivos para luchar por un Mundo más justo e igualitario, contra la exclusión social, contra la corrupción, por los derechos humanos....
En la línea que el buen Papa Francisco viene siempre insistiendo, especialmente en su encíclica Fratelli Tutti
Excelente comentario, Juan, y muy acorde con la realidad de los evangelios, a veces, demasiado envueltos por determinados sectores cristianos en teologías interesadas, que no responden a la exégesis y estudios serios del Evangelio. Tú lo haces con rigor.
ResponderEliminarMuchas gracias, Paco. Un abrazo
ResponderEliminar