viernes, 29 de septiembre de 2017
OFRENDA FLORAL EN EL CEMENTERIO EN HOMENAJE A FERMÍN SALVOCHEA. Juan Cejudo
El día 27 de septiembre se cumplía el 110 aniversario de la muerte de Fermín Salvochea.
La Asociación de Amigos/a de Fermín Salvochea, como viene siendo habitual, nos convocó a todos en el cementerio para hacer una ofrenda floral en la entrada del actual cementerio de San José donde reposan los restos del insigne gaditano.
Estuvieron presentes el alcalde de Cádiz José Mª González y el concejal de urbanismo y memoria histórica Martín Vila.
Varios medios de comunicación cubriendo la información.
Carmen Chico, saludó a todos agradeciendo la presencia y haciendo mención a los 110 años de la muerte de Salvochea y 10 años de su nombramiento como hijo predilecto de la ciudad. De de modo improvisado y espontáneo (yo no sabía nada) me invitó a decir unas palabras para comenzar el acto.
Después de dar las gracias a todos por la asistencia, dije que nos veíamos allí un año más para homenajear al que, para mí al menos, es el gaditano más honesto y auténtico que tenido Cádiz. Un hombre de una coherencia total que vivió tal como pensaba y no como muchos políticos que procuran adaptar sus ideas a su forma de vida y terminan penando como viven.
Dije que difícilmente saldría otra persona en Cádiz de este calibre y que debemos tomar conciencia de ello.
Fermín, que defendió con garra y exponiendo su vida, la llegada de la República, más tarde, viendo (una vez salió Pi y Margall del gobierno y entró el moderado Salmerón) que esa misma República, por la que tanto había luchado, estaba traicionando los principios revolucionarios, dejó la política y se hizo anarquista. Fermín no quería una República burguesa, sino revolucionaria en defensa de los trabajadores y de los sectores populares.
Se puede ver parte de mi exposición en este enlace de Onda Cádiz:
https://www.youtube.com/watch?v=f813yr_UJWA
Después el alcalde dijo también unas palabras insistiendo en la necesidad de que institucionalmente el Ayuntamiento de Cádiz estuviera allí en ese acto.
Destacó de Fermín su coherencia de vida y de ideas. Tal como pensaba lo hacía. Una virtud que hoy- dijo- no suele ser muy normal en los cargos públicos, pero que esa honradez tiene una grandísimo valor transformador, y muy necesaria para la función pública.
Y nos despedimos con ánimo hasta el próximo año.
----------
Fotos: Juan Cejudo
No hay comentarios:
Publicar un comentario