Convocados por mi querido amigo Pedro Castilla, asistimos, cerca de 40 personas, a la presentación del libro de Miguel Santiago: "Abrazados por la utopía". Libro prologado por el teólogo José Mª Castillo, amigo común, y cuyo epílogo ha redactado el cura de Entrevías (San Carlos Borromeo), Enrique de Castro, grandes referentes para Miguel.
Presentó a Miguel, Pedro, que comentó ampliamente muchas de sus vivencias con él destacando siempre su compromiso social con los más desfavorecidos y cómo, a la muerte de Diamantino, tomaría el relevo en la Presidencia de la Asociación pro Derechos Humanos de Andalucía.
Igualmente comentó el compromiso de Miguel y su grupo en la que sería la Comunidad Cristiana Popular "Sin Fronteras", muy comprometida socialmente y también muy denunciadora de las injusticias que se dan en la sociedad y dentro de la institución eclesial en distintos niveles . Pedro también comentó cómo él y su comunidad cristiana popular, que entonces se llamaba "Tierra Nueva", aprendieron de ellos para trabajar socialmente en el Cerro del Moro en Cádiz.
Luego subió a la mesa Rafael Lara que comentó cómo, al tomar el relevo de Miguel como presidente de la Asoc. de Derechos Humanos de Andalucía, el aprendió también mucho de él y prácticamente las referencias de la entidad hoy están tomadas de aquella época: implicarse en la defensa de los excluídos y desfavorecidos de la sociedad, no desde un despacho, con escritos e informes, sino compartiendo de cerca los problemas de la gente, estando con ellos. Tomar partido por los excluidos y desfavorecidos de la sociedad. Denunciar a los que provocan estas desigualdades e injusticias...
Por último intervino el concejal nuevo de Fomento y empleo Carlos Paradas, que dijo que conoció a Miguel porque era el amigo del amigo de su amigo, sin saber nada de su trayectoria profesional ni social ni cristiana, que refleja su libro, pero que se sintió muy acogido, por encima de la media de lo que suele ser habitual, cuando estuvo en Córdoba y que guarda de él un magnífico recuerdo.
No pudo venir, aunque tenía mucho interés, el cura Enrique de Castro, muy amigo de Miguel.
Por fin tomó la palabra Miguel que no dijo nada del contenido del libro (en verdad la mayoría de los presentes lo habíamos comprado para leerlo), sino de sus vivencias. Dijo que uno de los objetivos al presentar el libro en distintas ciudades era retomar el contacto con muchos amigos a los que hacía tiempo no saludaba.
Yo hacía también muchos años que no lo veía, desde nuestro último encuentro de Comunidades Cristianas Populares en Torrox, donde coincidimos mi mujer y yo con él en un taller colectivo de expresión corporal. Antes habíamos tenido otros encuentros, pues nuestra comunidad cristiana popular "San José" había empezado en el año 1984 y ellos más tarde, en 1990.
Me encantó lo que dijo Miguel (profesor de biología) sobre las enseñanzas que nos da la biología: el corazón está a la izquierda y nuestra sangre es roja y no azul. Debemos siempre pensar y actuar con nuestro corazón a la izquierda. Como dice un lema que he compartido en facebook (no sé su autor)
"Ser de izquierdas es optar por los pobres, indignarse con toda forma de injusticia y considerar una aberración la desigualdad social" . Pues eso.
Miguel ha tenido siempre su corazón a la izquierda y él dijo que mirando a los presentes podíamos sentirnos muchos también reconocidos en el libro: sus compañeros de Comunidades Cristianas Populares, y de otros colectivos cristianos, militantes obreros, de los derechos humanos y tantos otros que tienen un compromiso con las causas sociales justas.
También me gustó cuando dijo que él no sería la misma persona si no hubiera entrado en contacto directo con los chavales de la calle. Fueron ellos los que sufren , los excluidos, los que le enseñaron (como a tantos otros: Óscar Romero, Casaldáliga, Enrique de Castro) que la vida merece la pena ser vivida para luchar contra toda injusticia y contra toda desigualdad...¿No fue esa quizá la actitud de Jesús de Nazaret que optó por los pobres? Y cómo cuando se opta por ese estilo de vida, se empieza a ser "peligroso" para el sistema ; se sufren persecuciones y todo tipo de críticas, sea por el poder político o religioso... Fueron ellos los que mataron a Jesús el nazareno.
Hubo varias intervenciones del público al final de su charla todas muy positivas.
Miguel me dedicó su libro y me despedí de él con un fuerte abrazo y con recuerdos de mi mujer que no pudo asistir como le hubiera gustado.
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