lunes, 21 de enero de 2019

"LA REBELIÓN SILENCIOSA DE LOS 110 CURAS". Juan Cejudo, miembro de MOCEOP y de Comunidades Cristianas Populares


 El suplemento del diario "El Mundo" publica un artículo a toda página del Director de Religión Digital, José Manuel Vidal, sobre la situación que está viviendo la diócesis de Cádiz y Ceuta desde la llegada del actual obispo Rafael Zornoza. Su título: "La rebelión silenciosa de los 110 curas".

Describe muy bien la situación. Una situación que ha provocado envío de cartas al Nuncio y a los cardenales Omella y Osoro por parte de algunos curas y también del Grupo Cristiano de Reflexión-Acción, sin ningún tipo de respuesta de ellos para dar solución a la problemática que existe.

El artículo que comentamos, recoge las críticas sobre el obispo que gestiona la diócesis como si fuera una multinacional. Ha obligado a varios sacerdotes a que cambien la titularidad de bienes que los fieles donaron con fines caritativos a las parroquias y hasta ha habido acusaciones  de posible blanqueo de dinero  a algunos párrocos. Los curas, dice el artículo, critican al obispo por vivir como un señorito, comiendo en los mejores restaurantes de la  ciudad.

También hay quejas de que, para ir desplazando a los curas de la diócesis, está trayendo sacerdotes de varias partes del mundo: polacos, colombianos etc...todos de tendencia muy conservadora.

Se ha rodeado de un grupo de fieles colaboradores para dirigir la diócesis, muchos de ellos de fuera.

El canónigo y párroco de Conil Rafael Vez, es de momento, el único sacerdote que ha tenido la valentía de salir a la luz pública para comentar todo lo que está pasando. No se entiende el silencio cómplice de sus compañeros sacerdotes que en privado les reconoce que lleva razón, pero que temen las represalias del obispo si hablan. Por eso callan. De los 155 curas de la diócesis 20 son de fuera y otros 20 cercanos al obispo, muchos de ellos jóvenes. Los otro 110 curas se mantienen en silencio muy disgustados y en "rebelión silenciosa", sin hacer caso en la práctica a las directrices del obispo y sintiéndose ninguneados y  nada valorados por él. Soy testigo directo de algunos de estos testimonios de curas con los que he hablado y se sienten muy desanimados, aunque prefieren no hablar en público.

El artículo en cuestión que es muy amplio y detallado, recoge solamente el descontento de los curas y sus críticas más que justificadas. No recoge nada de las cartas de protesta que el grupo cristiano de reflexión-Acción, compuesto  de laicos, escribimos al mismo obispo en dos ocasiones y, al no tener respuesta ninguna, las hicimos llegar al mismo Nuncio y a los cardenales Omella y Osoro. Recibimos, después de escribirles por dos veces, unas escuetas respuestas de tipo diplomático, con invitación, por parte del nuncio,de que acudiéramos a los juzgados si hubiere motivos. No le estábamos planteando cuestiones judiciales, sino de tipo pastoral.

Entre nuestras quejas están los numerosos despidos que ha provocado en Caritas, Obispado y algunas parroquias para "sanear" económicamente la diócesis. Da igual el sufrimiento y la angustia de numerosas familias.  Y es que el ecónomo que dirige los asuntos económicos, tiene fama, no sólo de ser algo tosco, como dice el obispo, sino de tener estilos muy despóticos y autoritarios y de pretender llevar la diócesis como una empresa neoliberal. 


También nos quejábamos que no ponía los pisos vacíos y otros inmuebles,como el Seminario-casi vacío-, al servicio de los sin techo, los desahuciados o inmigrantes y refugiados. Todo esto hizo que un grupo significativo de cristianos nos llegáramos a concentrar con una pancarta varias veces en los juzgados o en el mismo obispado. Acciones nunca vista antes en la diócesis.


Merece la pena leer íntegro el detallado y pormenorizado artículo del director de Religión Digital que publica el suplemento de El Mundo.

No se puede leer bien aquí porque el archivo es formato imagen. Estoy esperando me envíen el enlace para que todos puedan leerlo con comodidad. En cuanto lo reciba lo pondré aquí. No tiene desperdicio.


No hay comentarios: