Esta noticia pasa casi desapercibida en nuestra prensa nacional, muy preocupada por otros asuntos económicos: si el Ibex 35 baja a niveles del 2009 o si se le puede subir o no el impuesto a los ricos y a los bancos para controlar nuestra deuda.
Pero, que 750000 personas, seres humanos, puedan morir de hambre en África importa muy poco a nuestra opinión pública. La mayoría serán mujeres y niños. Los más indefensos, como siempre. El hambre se extiende ahora a una sexta región del país africano. Los que están en peligro de muerte por hambre en toda la región: Somalia, Kenia, Yibuti... son cerca de 15000000 y no sólo por la sequía como bien han explicado diferentes analistas políticos.
La comunidad internacional, mira para otro lado. Están demasiados absortos por sus problemas económicos.
La Unión Africana apenas ha podido juntar unos escasos centenares de miles de dólares para enviar a Somalia. Quienes sí están colaborando, aunque con recursos insuficientes, son ONGS como Cruz Roja, Manos Unidas, Caritas....
El Vaticano creo que envió 50000 dólares. Unas ayudas completamente insuficientes. Y un problema más grave aún por las guerras internas dentro del mismo país que ha impedido durante bastantes días el reparto de la ayuda internacional.
¿No deberían de preocuparnos estas muertes de modo que exijamos a nuestras autoridades una mayor coordinación y eficacia en la ayuda a estos seres humanos? Esas muertes deberíamos evitarlas a toda costa si entre todos presionamos a nuestros políticos.
En internet circulan iniciativas en este sentido. Bueno sería que todos las apoyemos con nuestras firmas.
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