domingo, 31 de marzo de 2013

REFLEXIONES SOBRE LA SEMANA SANTA: LA RESURRECCIÓN. Juan Cejudo


Entiendo que a mis amigos no creyentes estas cuestiones no les interesen. Pero les pido un poco de comprensión para quienes nos consideramos creyentes porque un día como hoy, que celebramos la Resurrección de Jesús, es un día muy importante para nosotros.

No entro aquí a comentar cómo y de qué manera se puede entender la Resurrección. Teólogos muy importantes  difieren en el modo de explicarlo. Hay un artículo muy esclarecedor que os recomiendo de Torres Queiruga: "Repensar la Resurrección" que podéis encontrar en el siguiente enlace: http://servicioskoinonia.org/relat/321.htm.

Lo fundamental es que Jesús triunfa sobre la muerte y resucita. Los discípulos después de la muerte de Jesús, habían huido, se habían desmoralizado y se habían dispersado. Tenían miedo y estaban defraudados.

En el Evangelio de S. Juan, es María Magdalena la que acude al sepulcro y ve atónita que Jesús ya no está en el sepulcro. Acuden corriendo Pedro y Juan y toman conciencia de que Jesús ha triunfado sobre la muerte y Dios le ha resucitado. A partir de ahí, les entra una gran fuerza interior que hace que vuelvan todos a reunirse y a experimentar de diversas maneras la presencia real y viva de Jesús en medio de ellos.

Este hecho será algo fundamental para que aquellos primeros cristianos vuelvan con gran fuerza a dar testimonio de Jesús por todos los lugares. La venida del Espíritu en Pentecostés les aumentará la fuerza y el empuje en sus vidas. Saldrán a todas partes anunciando a Jesús. Muy pronto las comunidades de cristianos- que se desenvolvían en un medio hostil y pagano- irán creciendo y multiplicándose por todos lados. Compartirán bienes, lo pondrán todo en común para que nadie sienta necesidad y pronto tendrán la admiración de todo el pueblo. También de los no creyentes.



Hoy, como entonces, estamos convencidos que ¡SÍ, SE PUEDE!

Podemos luchar para vencer a las fuerzas del mal, junto a tantas personas y colectivos (creyentes o no) que ya lo están haciendo, como antes lo hicieron otros en otras épocas de la historia.

Ahí están esas luchas de liberacion en tantos países de América Latina: de indígenas, de ecologistas, de mujeres, de jóvenes...

Ahí están en nuestro país esas luchas verdaderamente admirables de los afectados por los desahucios que se unen para intentar frenarlos en nuestro país ( y que muchas veces consiguen) y para movilizar a toda la sociedad española para que la actual ley  obsoleta de principios del siglo pasado desaparezca y se haga otra más justa con los que puedan perder su vivienda.

Luchas de los  trabajadores y de otros muchos colectivos en todo el país para intentar frenar con sus movilizaciones frecuentes los recortes sanitarios, educacionales, de servicios sociales  fundamentales...y que a veces consiguen, como ha ocurrido recientemente evitando el cierre de los servicios de urgencias de numerosas localidades de una Comunidad autónoma.




Ahí están esas mareas ciudadanas (de sanidad, de educación, de servicios sociales, ecologistas, feministas etc...), ese Movimiento del 15M, multiplicado en centenares de asambleas populares por todo el país, el Movimiento "Rodea el Congreso"...
 
La lucha de tanta gente dentro de la Iglesia para conseguir que la Iglesia cambie en la dirección que quiso Jesús: en atención a los más débiles de la sociedad y en una renovación muy amplia de sus desfasadas estructuras para buscar estilos que sintonicen con el hombre de hoy.
La lucha de Movimientos populares pidiendo un cambio radical del actual sistema económico y político que sólo sirve para defender a los más ricos y seguir los dictados de las autoridades económicas europeas y mundiales. Para que las personas sean lo primero y los derechos humanos sean respetados y la economía esté al servicio del pueblo y no el pueblo al servicio de la economía.
 

Por eso la Resurrección de Jesús nos aporta a los creyentes una gran fuerza. Estamos convencidos que sí que podemos. Creemos que la utopía es posible y que de alguna manera ya se está haciendo realidad en muchos lugares, en muchos países y de muchas formas.

CRISTO RESUCITÓ. ¡NOSOTROS SÍ QUE PODEMOS!

2 comentarios:

jaumepubillgamisans@gmail.com dijo...

Feliz Pascua de Resurrección!

Juan Cejudo dijo...

Feliz Pascua, Jaume!!

Un abrazo: Juan