martes, 20 de agosto de 2019

ASISTÍ A LOS ACTOS DE CONMEMORACIÓN DEL 72 ANIVERSARIO DE LA EXPLOSIÓN DE CÁDIZ (I): VISITA GUIADA AL MUSEO PERMANENTE DE LA EXPLOSIÓN. Juan Cejudo


Un año más celebramos el pasado día 18 de Agosto el aniversario de la Explosión de Cádiz de hace 72 años.

A las 11,30 un importante grupo de personas nos dimos cita en el Castillo de Sta. Catalina para participar en la visita guiada al Museo permanente. Un museo conseguido gracias al empuje de personas que se han implicado mucho para que ello fuera posible y gracias también a la colaboración del actual Ayuntamiento.

José Antonio Aparicio, historiador, nos fue explicando con detalle en la primera sala los efectos de la Explosión sobre la ciudad, especialmente en la Zona de Astilleros, Tolosa Latour, San Severiano y en la Casa Cuna y Sanatorio Madre de Dios, así como en el mismo interior de lo que es el Instituto Hidrográfico donde estaban almacenadas los centenares de bombas que explosionaron y ocasionaron la tragedia en la ciudad.



Las fotos (algunas de ellas recuperadas de la primera exposición que se hizo con motivo del 50 aniversario) describían perfectamente la tragedia. Hablaban por sí solas.


Sobre la maqueta de la ciudad fue explicando José Antonio cómo quedó destruído todo el barrio de S. Severiano y las viviendas de Tolosa Latour y alrededores y cómo la muralla que queda debajo de Bahía Blanca evitó por un lado la propagación de la tragedia dentro del casco histórico de Cádiz, pero por otro, hizo de efecto rebote y devolvió toda su fuerza explosiva hacia las zonas que quedaron totalmente destruidas.

Sobre la gran foto del fondo de la sala nos volvió a mostrar los efectos terribles de la Explosión.




Ya en la otra sala, la de las víctimas, estuvo explicando y comentando con nombres y apellidos todas las personas fallecidas, de las que de muchas de ellas hay fotografías allí expuestas, como la de los 27 trabajadores de Astilleros, la cocinera de la casa cuna y otras  muchas destacando para mí la foto grande de mi padre Ramón Cejudo y su compañero Alejandro Góma Barahona.
Mi padre Ramón Cejudo


Ramón Cejudo y Alejandro Goma Barahona

Para mí también especialmente importante la foto del Comandante Bescós, pues, por su informe, redactado a instancias de sus superiores, quedó demostrado 4 años antes de la Explosión que  aquel armamento había que quitarlo de la ciudad con carácter urgente pues "podría ocasionar una tragedia de carácter nacional", como por desgracia ocurriría. No le hicieron caso.
Comandante Bescós

Explicó también José Antonio Muchos de los objetos que se han podido recuperar de aquellos años.


Una visita que no viene mal recordar para que Cádiz no pierda su "memoria histórica" sobre un suceso tan trágico que conmocionó a toda España y también en otros muchos países.

Estuve acompañado por un primo hermano mío muy sensibilizado también con el tema pues su padre trabajaba en el Instituto Hidrográfico como marino, aunque no estaba aquella noche en el lugar de la tragedia y también acompañado por un amigo de S. Fernando, compañero de estudios.




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