El pasado viernes día 9, al terminar la concentración frente a la sede del P.P para exigir la readmisión de Marisa, ésta leyó una carta que, en mi opinión, había sido escrita con el corazón más que con las manos, pues hablaba en ella de todos sus sentimientos como mujer trabajadora y como madre con hijos a su cargo. Una mujer decepcionada por las palabras bonitas de un político que tres meses antes la había atendido y prometido hacer gestiones "para ver posibles soluciones"..y bla, bla...
Dejo aquí la carta para quienes deseen leerla detenidamente.
Un cordial saludo: Juan
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Cádiz, a 9 de febrero de 2018
A/A Sr. José Blas Fernández
Señor concejal y presidente de la Fundación Eléctrica de Cádiz:
Es vergonzoso, triste e insultante que tenga que recordarle que el 15 de noviembre de 2017 tuvimos con usted una reunión en la cafetería del Hotel Playa Victoria (donde Ud. nos citó a
las 10:00h) y, tras una larga conversación de hora y media donde se mostró bastante receptivo, afirmó que iba a realizar gestiones “para ver las posibles soluciones”, al tema de mi Readmisión-cuya legitimidad está garantizada por Sentencia Judicial- cuando “el tema” depende solamente de su propia voluntad política.
Voluntad política que se traduce en un simple cambio de voto en el Consejo de Administración de una empresa municipal gaditana donde -también tengo que recordárselo- hizo usted uso de un “voto doble” el día 29 de junio de 2017 para dejar sin empleo a una trabajadora de Cádiz con una sentencia dictada a su favor para continuar trabajando con un contrato legal y digno.
Usted nos pidió “mantener una espera” después de ser informado que Eléctrica de Cádiz había retirado recurso contra la Sentencia ante el Tribunal Superior de Justicia y que, por tanto, el único recurso existente era el interpuesto por mí, bajo la representación de mi sindicato.
Manifestó usted desconocer por qué había retirado el recurso la empresa, pero ese hecho aclararía el dictamen final del TSJA confirmando lo dictado en el Juzgado de lo Social nº1 o pronunciándose sobre la nulidad del despido… y aun así, le aclaramos que esa espera no debía en ningún caso alargarse más allá de la finalización del año 2017 ya que, al no existir recurso por parte de la Empresa, lo que único que se estaría haciendo sería condenarme a la exclusión social al continuar sin trabajo y sin prestación de desempleo.
Según usted, sólo sería necesaria la espera de dos semanas “para que le llegara un informe”, el cual iba a resolver su postura ante este conflicto. Entiéndase como un “conflicto” para usted si votar a favor de la readmisión de una
trabajadora, junto al resto de los partidos que componen el Consejo de Administración de Eléctrica de Cádiz o, por el contrario, posicionarse junto a la multinacional Endesa, defendiendo los intereses que esta representa, a favor de la represalia, la precariedad laboral, y el masivo embolsamiento de capital a costa de l@s ciudadan@s que somos clientes de esta empresa.
También le traeré a la memoria que, en el mes de Agosto, me llamó Ud. para hablar conmigo, tras la insistencia de continuas visitas por nuestra parte a la Sede de su partido.
En esa ocasión le informé de la convocatoria de la primera concentración que haríamos en su sede en el mes de agosto y usted se disculpó por haberme utilizado como arma arrojadiza en un pleno donde sacó mi tema. Un “argumento” que usted esgrimió en esa conversación fue que no daba suficiente
credibilidad a la Sentencia del juzgado de lo Social “por la falta de experiencia”, según usted, “del juez que había emitido la misma”….
Pero que “si el Tribunal Superior de Justicia confirmaba la
Sentencia 143/17 del 20/04/2017 dictada por el Juzgado de lo Social n.º 1”, usted sería “el primero en proponer al Consejo de Administración mi READMISIÓN”.
No le voy a hablar de “ética” aunque sí me permitiré recordarle también que, al despedirnos de nuestro encuentro en el Hotel Playa Victoria, le pedí que, por favor, se situara en mi lugar e intentara empatizar con mi situación y que sólo en sus manos estaba no llevar directamente a mi familia a la precariedad y a la pobreza... sin saber yo por entonces (como se ha evidenciado) que la empatía es una emoción humana que es usted incapaz de albergar.
Tanto usted, como su compañero, Ignacio Romaní, son responsables de la situación de desamparo en la que se encuentra mi familia, ambos son cómplices de políticas de represión, de destrucción y de una cruel discriminación por parte de una empresa que lleva en su definición el apellido de “municipal”.
Han preferido silenciar, ignorar, y olvidar esta situación ya que por lo visto no les aporta ningún “rédito político”: únicamente se trata de “una sola mujer afectada”, no hay un gran número
de posibles votantes en este conflicto laboral que puedan ser aprovechados para su precampaña electoral. Tan sólo soy eso para ustedes: un número despreciable.
Sepan usted y sus compañeros de partido que esta “única mujer” con sentencia a favor, despedida improcedentemente, con contrato en fraude de ley y con cesión ilegal, tiene 40 años y
una familia por la que va a seguir luchando para hacer valer su derecho a trabajar. “Derecho a trabajar”… ¿le suena, Sr. Fernández?. Parece una de las consignas que seguramente utilizarán en sus demagógicos discursos de campaña electoral, para seguir engañando y manipulando.
Por tanto, le emplazo a retractarse públicamente de sus torticeras mentiras y declarar de una vez a toda la ciudadanía sus únicos y verdaderos objetivos e intereses o resarcirme de sus engaños simplemente cumpliendo con su propio argumentario de político al servicio del bien público y respetuoso con la ley.
Marisa Iglesias Prada.
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