jueves, 28 de marzo de 2013

REFLEXIONES SOBRE LA SEMANA SANTA: JUEVES SANTO. Juan Cejudo


Las lecturas de este Jueves Santo nos aportan dos hechos muy importantes: Jesús lava los piés a sus discípulos ( y discípulas) y celebra la Cena Pascual donde por vez primera comparte el pan y el vino con ellos y les dice que lo sigan haciendo en su memoria. Por eso, la Eucaristía  la siguen celebrando los cristianos desde entonces hasta el día de hoy.

El lavatorio de pies de Jesús.

Era una costumbre judía que solían hacer los criados, los siervos y las mujeres. Jesús lo hace para dar ejemplo de cómo hay que estar en actitud de servicio desde la sencillez. En ese sentido los gestos del papa Francisco de humildad y sencillez están llenos de sentido evangelico.

Hoy la actitud de servicio hay que tenerla con los que más lo necesitan: los excluídos por un sistema económico injusto: los sin techo, los desahuciados, los parados sin ningún tipo de recursos, los enfermos, los ancianos que viven en soledad, los inmigrantes sin papeles que este sistema excluye hasta de la atención sanitaria...etc...


Pero ¿realmente está la Iglesia en su conjunto volcada hacia estas personas? Sin duda que hay muchísima gente que sí está en países del tercer mundo dando aliento y ayuda a quienes malviven en la miseria y la indigencia o en medio de guerras o enfermedades...También aquí hay mucha gente buena que colabora en diversas ONGS aliviando el sufrimiento de mucha gente...Ahí está lo mejor de la Iglesia de Jesús, sin duda.

Pero...¿están nuestros obispos dando ejemplo? ¿Por qué no dan ejemplo y entregan gran parte de sus bienes- bienes de la Iglesia- para ponerlo a disposición de quienes hoy viven desesperados por los efectos de la crisis? ¿Por qué no entregan muchos de sus pisos y locales para los deshauciados o los sin techo?

La celebración de la Eucaristía

Jesús lava los piés a los discípulos y discípulas dentro de la cena. Es decir: esa actitud de servicio es algo fundamental para poder celebrar la Eucaristía. No se puede concebir un cristiano que no tenga la actitud de servicio a los más desfavorecidos de la sociedad como algo prioritario y fundamental en su vida.

Me pregunto: ¿Cómo pueden asistir a las misas políticos, ministros que se llaman falsamente "cristianos", que están viviendo para contentar a los mercados, a las instituciones financieras europeas o internacionales y actúan en contra del pueblo?
¿Cómo se puede comulgar y negarse a una ley de la dación en pago para proteger mínimamente a los desahuciados que se quedan a vivir en medio de la calle?

¿O que aprueban una reforma laboral que machaca los derechos de los trabajadores y que ha provocado 800.000 nuevos parados desde su aprobación?
 
¿Cómo se puede asistir a una misa y consentir las acciones preferentes que les permite robar a quienes de buena fe confiaron en lo que les decía su banco  y a donde llevaron los ahorros de toda su vida? Ahora se ven hundidos en la miseria. 

¿Cómo esas personas pueden asistir a una misa, comulgar y quedarse tan panchos?

Hay que tomarse muy en serio el significado de participar en la Eucaristía y de tener una verdadera actitud de servicio con quienes lo necesitan.

No vale asistir a las procesiones en lugar preferente como politico de turno cuando se olvida uno de lo fundamental. Ni asistir a las misas "para cumplir con el precepto".

El mensaje del Jueves Santo trae unos compromisos muy serios para todos los que nos llamamos cristianos. Tampoco se soluciona todo con asistir a unas procesiones más o menos en plan folklórico o divertido. No es eso...no es eso.

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