La larga lucha de los mineros ha culminado con su llegada a Madrid y con la gran manifestación apoyada por decenas de miles de personas de todo el Estado.
Lamentable, la actuación policial que ha desembocado en decenas de detenidos y heridos. Unas personas que sólo luchan por el pan de sus hijos y el futuro laboral que les amenaza no se merecen una represión tan dura.
Hay que destacar la gran corriente de simpatía que esta marcha ha conseguido transmitir a tantísimos ciudadanos que les han apoyado de mil maneras.
En mi opinión, es una lucha admirable la que han llevado a cabo con esos encierros prolongados en los pozos mineros, con esas largas marchas de más de 400 kilómetros durante 20 días, con esa gran concentración en la Puerta del Sol, mientras decenas de miles de ciudadanos les apoyaban y también diversos artistas. Y con el éxito de esa manifestación tan masiva, tan ampliamente apoyada por tantísimas personas.
La lucha de los mineros es un ejemplo hoy para todos nosotros que estamos amenazados de muchas maneras por el paro, por los recortes salvajes hoy anunciados por Rajoy ( más todos los que ya llevamos soportados). Es una luz que nos indica el camino a seguir: una lucha tenaz, firme y constante, sin desmayo para que nuestros derechos, laborales y sociales, no se vean tirados por la borda, después de décadas.
Todos tenemos que aprender de su lucha ejemplar
Todos tenemos que aprender de su lucha ejemplar
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