La otra convocatoria importante de hoy en Cádiz estaba en la calle Benjumeda, 35. Era el día señalado par la ejecución de un desahucio, la de Antonio Moreno, de 57 años, con una invalidez del 86%, su mujer y una hija de 16.
Un buen grupo de personas, entre las que estaban varios concejales electos de PCSSP hicieron una piña formando cordón para impedir la entrada en la vivienda. Pero "Mucha, mucha policía" había allí: varios furgones con más policías que manifestantes. Un despliegue de fuerzas desproporcionado. Corte de paso para quienes deseaban acercarse a la casa, como ocurrió con los también concejales electos Martín Vila y Eva Tubio a los que la policía les impidió el paso.
Desde el primer momento nuestro alcalde intentando negociar una solución al problema. Ofreció pagar un mes de alquiler mientras encontraban una casa para la familia, pero la intrasigencia de la propiedad impidió un acuerdo que hubiera sido humano, proporcionado y sensato. Al nuevo alcalde, que lleva una semana en el cargo, no se le ha dado ni el margen de un mes para buscar una solución.
He visto las imágenes de los vídeos. Impresionantes. Ese cordón humano formado por ese grupo de ciudadanos valientes y comprometidos con las causas sociales justas y esa policía rompiendo a la fuerza el cordón y retirando uno a uno a todos los que allí estaban. Demasiada policía, como dice la canción de Sabina: "Mucha, mucha policía...". Por supuesto que mi crítica no va para los policías que estaban allí, sino para quienes les dieron esas órdenes inhumanas e injustas. Se podía haber buscado una solución más humanitaria, menos traumática, más eficaz también.
Decir que como gaditano me siento hoy orgulloso de mi nuevo alcalde que ha estado ahí intentando encontrar una solución negociada. Que ha estado con esa familia hasta el último momento. MI satisfacción por el comportamiento de esos nuevos concejales que han estado donde tenían que estar: con el pueblo, luchando con fuerza para impedir ese desahucio. Algo impensable con el anterior equipo de gobierno...Mi satisfacción para todos los gaditanos que hoy han estado ahí apoyando a esa familia tan necesitada como también a todos los que hoy en la Delegación de Políticas Sociales estuvieron apoyando a las familias que tienen a sus hijos en peligro de quedarse sin comer en verano...
Y una reflexión final: aunque el alcalde y los concejales estén ahí partiéndose la cara por los problemas sociales, sólo la unión del pueblo, la presión popular de un número muy importante de personas podrá influir para que hechos de esta naturaleza no se sigan repitiendo. Por éso, gobierne quien gobierne, es necesario fomentar la unidad entre todos los movimientos sociales.
Como dice el refrán "La unión hace la fuerza". No es igual que estemos 25 o 30 personas a que seamos 600 o 1.000.
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